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Un alto funcionario del Ejército Popular de Liberación de China señala que las posibilidades de guerra entre Washington y Pekín se han hecho "más reales".
La guerra entre Estados Unidos bajo la presidencia de Donald Trump y China “no es solo un eslogan”, sino que “se está convirtiendo en una realidad en la práctica”, escribió un alto militar del Ejército Popular de Liberación en la página web oficial de la Comisión Militar de China, informa el periódico ‘The South China Morning Post’.
El pasado 20 de enero, el mismo día de la investidura de Trump, el Ejército Popular de Liberación de China señaló que las posibilidades de guerra se han hecho “más reales”. Además, el funcionario afirmó que el “reequilibrio” de la estrategia de EE.UU. en Asia, sus despliegues tanto en el mar de la China Meridional como Oriental y su intento de armarse con un sistema de defensa antimisiles a Corea del Sur son “puntos de conflicto que se acercan al punto de ignición”, según el diario.
Asimismo, el oficial chino indicó que el Ejército del país llevará a cabo ejercicios militares en alta mar “ignorando cualquier provocación extranjera”.
China es a menudo blanco de las críticas de Trump, que durante su campaña presidencial acusó a Pekín de la pérdida de empleos en Estados Unidos y prometió subir los aranceles de las importaciones chinas hasta el 45%. El republicano también prometió declarar a China como manipulador de divisas desde su primer día en la Casa Blanca.
El pasado 20 de enero, el mismo día de la investidura de Trump, el Ejército Popular de Liberación de China señaló que las posibilidades de guerra se han hecho “más reales”. Además, el funcionario afirmó que el “reequilibrio” de la estrategia de EE.UU. en Asia, sus despliegues tanto en el mar de la China Meridional como Oriental y su intento de armarse con un sistema de defensa antimisiles a Corea del Sur son “puntos de conflicto que se acercan al punto de ignición”, según el diario.
Asimismo, el oficial chino indicó que el Ejército del país llevará a cabo ejercicios militares en alta mar “ignorando cualquier provocación extranjera”.
China es a menudo blanco de las críticas de Trump, que durante su campaña presidencial acusó a Pekín de la pérdida de empleos en Estados Unidos y prometió subir los aranceles de las importaciones chinas hasta el 45%. El republicano también prometió declarar a China como manipulador de divisas desde su primer día en la Casa Blanca.