
Yo y mis amigos (realeza europea, banca, y mercados bursátiles), decidimos todo.
Las órdenes de Alexander Soros, Nathaniel Rothschild y sus socios a la Unión Europea y Ucrania son alargar la tregua un mes para volver a la guerra. Y si funciona la paz, trasladar la guerra al Sáhara y el Mediterráneo. También preparan países como Ruanda en el Sahel.
Parece que la paz duradera como desea Rusia y EEUU es una trampa hasta que los gobiernos europeos puedan arreglárselas para adquirir una cuota de compra de armas al holding Carlyle Corporation de los mismos señores de la guerra europea mundial.
Nos han engañado con la cuota general e igualitaria de guerra. La gente no ahorra -no puede la mayoría-, por eso van a diferenciar entre expropiar un 2% sobre nóminas a los que no ahorran ni pueden, y más de un 20% a los depósitos de ahorro e impuestos a fondos de inversión que son los menos. Será un escándalo pero este gobierno puede con todo, ni los escándalos lo han tirado y no lo harán los impuestos de atraco a la propiedad privada. Y si no, entra PP abyecta y traicionera que es la misma cara del espejo al servicio de Soros. Así de paso se perpetúan todos en el poder con la guerra.
En Francia son más sinceros en este tema que en España y hablan de un 47% de implemento del gasto de Defensa desde 2017.
El anuncio de expropiación de ahorros y salarios por trabajo será en un mes el compromiso que les permitirá la compra de armas en cuanto la aprueben decreto ley y quizás sin consenso más que la decisión del presidente del gobierno, y se comenzará a recaudar de inmediato y antes del fin de la Declaración de la Renta 2024-2025. En octubre 2025, con la conversión del euro fiduciario a digital se perderá el control del dinero, y de embargos y expropiaciones que serán secretas y llegarán a agotar no las fortunas pero sí los nuevos ricos, incluidos socialistas menos una lista secreta de amigos.
La formula utilizada en los años 40 de recaudar fondos benéficos para la guerra no funciona porque en ningún país europeo existe ya una ideología que sustente el ánimo de donaciones para la guerra y sí para salvar vidas como médicos sin fronteras, entonces se vuelve al sistema medieval de expropiación.
EEUU no va a impedirlo porque será el principal beneficiario de venta de armas. Un doble juego necesario para el restablecimiento de la economía a través de la economía de guerra de terceros (Europa, Mediterráneo, y Africa principalmente hasta el Sáhara). La prueba es que Trump a restituido los fondos de guerra a Ucrania que de entrada había anunciado retirar, y que Ucrania acaba de hacer un pedido de misiles a Alemania. Sin embargo EEUU va a sufrir el descenso de la venta del F35 por Rafale franceses y cazas suecos de Saab, y eurofigther alemanes ante la noticia del interruptor secreto de apagado del avión. De hecho al salir la noticia, Portugal ha cancelado la compra de 24 F35.
Miren la fecha en plena propuesta de un mes de paz, 10/03/2025, por eso es todo mentira la tregua: «El Ministerio de Defensa de Ucrania ha firmado un acuerdo con la empresa alemana de defensa Diehl Defence, fabricante del sistema de defensa aérea IRIS-T, para triplicar el suministro de estos sistemas y sus misiles.
Así lo anunció el ministro de Defensa de Ucrania, Rustem Umerov, vía Facebook, informa Ukrinform».
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Si Donald Trump no se pone aun más y más duro con el estado profundo, su socialismo, y la masonería cuya cabeza visible son los Soros pero esconden a todas las familias, perderá esta guerra que de momento se manifiesta en aviones comerciales y aeropuertos (cada semana uno o varios sucesos de guerra interna secreta).
Van a forzar el reclutamiento militar forzoso de europeos blancos (para así ayudar a que queden vivos los inmigrantes para la sustitución y superación numérica de la población blanca en toda Europa). La idea es eliminar la suficiente población blanca especialmente que sea superada por los bastardos moronegros como ha sucedido en Ucrania donde han eliminado toda la franja jóven a través del reclutamiento forzado de entre los 15 años a los 60 años.
Fijarán los puntos de guerra y conflicto que serán tratados. Una guerra de diseño.
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